En un partido para al olvido, Perú no pudo con la categoría impuesta por Argentina, selección a la que le bastó solo una jugada de presión para romper el orden de la defensa blanquirroja y marcar el 1-0 que sepulta las esperanzas de una nueva Copa Mundial.
La selección peruana cae nuevamente de visita y eclipsa el gran partido contra Chile con el que inició esta fecha triple. Y aunque hay errores puntuales en los dos últimos partidos (la pérdida del balón de Cueva frente a Bolivia y el penal errado hoy por Yotún contra Argentina), resulta ocioso señalar ‘villanos’ cuando enfrentamos al campeón de América con 7 lesionados.
Desde el inicio del encuentro, Perú apeló a una marca disciplinada y a un sacrificio notorio para igualar el estado físico de los argentinos, cuya presión hacía fallar los pases de Christian Cueva y Raziel García, quienes normalmente no fallan en una simple asistencia.
Y aunque el reloj susurraba al oído al aficionado peruano que se acababa el primer tiempo y las tablas no era, al fin y al cabo, un mal negocio, Lautaro Martínez se encargó de gritarle a los peruanos, a los 43 minutos, que el campeón de América lleva los colores de Maradona.
Fuente: Agencia de Noticias Andina