Si hay una fecha en el calendario de cualquier mes que se encuentra desprestigiada y que casi nadie espera con una expectativa positiva es, sin lugar a dudas, el viernes 13, día que es considerado por los supersticiosos como de mala suerte.
Tan arraigada se encuentra esa creencia que no son pocas las personas que en esa fecha evitan realizar ciertas actividades como casarse, viajar en avión, ir de compras o retirar dinero del banco, pues creen que por alguna razón que solo se encuentra en su cabeza les irá mal y nada saldrá como lo tenían planeado.
El 13 es considerado desde la antigüedad como un número de mal augurio, y no por pocas razones. Una de ellas tiene que ver con que en el capítulo 13 del libro bíblico del Apocalipsis se habla de la aparición de la ‘bestia’, que es descrita como semejante a un leopardo, y sus pies como de oso, y su boca como boca de león.
También se dice que el viernes guarda una relación con el luto porque ese fue el día en el que Jesucristo murió; y porque en la Cábala y algunas leyendas nórdicas se cree que son 13 los espíritus malignos.
En tiempos modernos, la concepción del 13 como número maldito se hizo aún más arraigada tras el estreno en 1980 de la película estadounidense Viernes 13, que dio vida al personaje de Jason Voorhees y lo incluyó en la lista de villanos más temidos en la historia del cine de terror.
Sin embargo, no existen evidencias ni estudios que sustenten esa afirmación; aunque las consecuencias que se pueden experimentar por darle innecesaria luz a un mito como ese pueden llegar a extremos impensados.
Fuente: Diario El Comercio