Las exportaciones peruanas de café y cacao han registrado un crecimiento histórico entre 2023 y 2024, alcanzando un valor conjunto de casi 2,400 millones de dólares, superando incluso las ventas de arándanos. Este logro es particularmente significativo, ya que involucra a más de 300,000 pequeños productores que cultivan en 690,000 hectáreas de la Amazonía, enfrentando desafíos como la falta de tecnología, financiamiento y asistencia técnica. Además, el 90% del precio internacional beneficia directamente a los agricultores gracias a la competencia entre más de 400 empresas exportadoras.
El éxito de estas cadenas de valor también está ligado a los programas de desarrollo alternativo impulsados por DEVIDA, USAID, la Unión Europea y otros cooperantes internacionales. Estas iniciativas han apoyado a los agricultores que dejaron cultivos ilegales como la coca para apostar por el café y el cacao, productos de alto potencial en el mercado global. «Es crucial inyectar tecnología en la producción para reducir costos, aumentar la productividad y mitigar la deforestación», afirmó José Yturrios, director de Recursos – División de Agricultura Sostenible y Cambio Climático.
Aunque los avances son notables, consolidar este éxito requiere enfrentar retos importantes. Incorporar a los pequeños agricultores en esquemas de financiamiento climático y mejorar la gestión sostenible de las tierras son prioridades clave para garantizar el crecimiento sostenido y sostenible de estas cadenas de valor en el Perú.