El último Informe Económico de Construcción (IEC 77) de la Cámara Peruana de la Construcción (CAPECO) revela que la actividad constructora en Perú ha enfrentado un panorama complicado durante el primer cuatrimestre del año, con fluctuaciones debidas a diversos factores internos y externos. A pesar de un descenso en marzo del 2023, abril mostró una recuperación prometedora con una proyección de alza del 12.5%, gracias en gran parte al impulso de la obra pública, que registró un aumento del 31.4%. Sin embargo, el sector aún lidia con desafíos significativos, como un descenso del 2.5% en la producción de marzo y un acumulado de diecinueve caídas en los últimos veintiún meses.
Adicionalmente, el primer cuatrimestre del año cerró con cifras récord en ejecución de obra pública, aunque el número de obras paralizadas también se incrementó, especialmente en los gobiernos locales que representan casi tres cuartas partes de estas paralizaciones. Guido Valdivia, director ejecutivo de CAPECO, enfatizó la necesidad de medidas urgentes para reactivar tanto la obra estatal como la inversión privada, en medio de una postura pasiva del gobierno y legislaciones potencialmente perjudiciales para el sector.
La situación también ha afectado al sector hipotecario, con una reducción en los créditos desembolsados y un declive notable en el otorgamiento de créditos para vivienda social, complicando aún más el panorama económico y social del país. Esta confluencia de factores negativos ha provocado una contracción general en el producto bruto interno y un deterioro en la percepción del potencial de crecimiento de la economía peruana, evidenciando la importancia crítica del sector construcción en la mejora de la competitividad y el bienestar nacional.