Escribe: Renato Romero Silva
El último sábado, Pablo Roberto Quispe Chávez, internó a su padre, Marcos Quispe, en el hospital Regional Docente de Trujillo, por COVID-19, con la intención de ocupar una de las camas de la Unidad de Cuidados Intensivos del centro médico, sin embargo, fue trasladado a otra área y hasta el momento no tiene noticias sobre el estado de su salud, y no le han permitido ingresar al hospital para ver a su progenitor.
“El día sábado nos dijeron que habían camas UCI, por esa misma razón nosotros vinimos acá. Cuando llegó mi papá nos dijeron que no hay cama UCI, que lo establecieron en el área de Isla, cama 13. Si nos hubieran dicho acá afuera que no hay camas UCI, a mi padre lo hubiéramos regresado a nuestra casa, quizás le hubiéramos pagado un médico o una enfermera particular y lo estuviéramos ahí viendo”, expresó indignado el hijo del paciente para OVEJANEGRA.
Asimismo, indicó que les iban a dar una respuesta entre 8 y 9 de la mañana del día de hoy, sin embargo, no fue así.
La familia Quispe Chávez se encuentra mortificada por el desconocimiento del estado de salud de su padre y esperan que personal del hospital se comunique lo antes posible con ellos para que puedan verlo.