Jorge Merzthal, director general de maestrías de ESAN, considera que, para impulsar la formalización en el país, los trámites deben ser diferenciados según el tipo de empresa.
Existen alrededor de 5 500 000 unidades productivas informales en el Perú, según un informe del Instituto de Economía y Desarrollo Empresarial (IEDEP) de la Cámara de Comercio de Lima (CCL). Al respecto el director general de maestrías de ESAN, Jorge Merzthal sostuvo que una persona que desea abrir un negocio de manera individual se enfrenta a múltiples procesos y exigencias, tales como el proceso de pago de impuestos, la entrega de documentos, etc.
“Por ello, el gran problema para crear una empresa en el país es la tramitología, la cual es engorrosa y lenta y que no genera ningún valor agregado para el emprendedor. Por el contrario, genera sobrecostos y demoras. Al no generar valor, el trabajador opta tomar el camino fácil, ser informal. Y al serlo genera un impacto negativo en la economía y el Estado, pues hay menos recaudación, los trabajadores no cuentan con los beneficios correspondientes, etc.”, señaló.
Actualmente, los trámites para crear una empresa son los mismos, tanto para negocios pequeños como grandes, y muchas veces no son necesarios. “Lo que hoy se necesita es una mayor simplificación administrativa. Hacer que ese trabajador con empresa individual no pase por un proceso complicado, pues no tiene sentido cuando estos negocios no tienen alto valor de facturación. Creo que desde este punto se podría trabajar en el tema de simplificación. Es decir, no todas las empresas deberían tener el mismo nivel de trámites”, puntualizó Mertzhal.