Durante estos últimos 5 años La Libertad ha experimentado una incursión significativa de criminales, tanto de nacionalidad peruana como extranjera, que se han unido a mineros ilegales con la intención de asumir el control de las actividades mineras en nuestra área local. Estos individuos, comúnmente llevan a cabo sus acciones de manera violenta, haciendo uso de armas de fuego y dispositivos explosivos.
Por esta razón, el distrito de Pataz, en La Libertad, se ha convertido en una zona incontrolable debido a la disputa por el oro, lo que ha llevado a un aumento de la minería ilegal y la criminalidad. Este año, se han reportado 26 muertes en la región, sin contar las víctimas no identificadas que se encuentran bajo los desmontes.
Bandas criminales extranjeras se han asociado con grupos nacionales para apoderarse del oro en la zona, lo que ha exacerbado la violencia. Estas bandas, incluyendo el grupo conocido como el «Tren de Aragua» de Venezuela, operan en socavones de minas y han aprovechado la falta de infraestructura policial y recursos para expandirse.
Los delincuentes, conocidos como «parqueros», secuestran a mineros artesanales para obligarlos a revelar la ubicación de los depósitos de oro. Además, estas bandas están involucradas en lavado de activos y financian invasiones de terrenos.
La minería ilegal ha tenido un impacto negativo en la producción de oro en la región de La Libertad, así como en la disminución de las transferencias de canon y regalías. Además, ha llevado a la trata de personas y al aumento de bares y prostíbulos clandestinos donde atienden menores de edad y extranjeras.