En el país se han administrado más de 13 millones de dosis de la vacuna contra el COVID-19 y 5,4 millones de peruanos ya tienen ambas aplicaciones. Así, mientras la campaña avanza a más grupos de edades, algunas personas rechazan la vacuna de Sinopharm a la espera de otra.
El subdirector de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Jarbas Barbosa, dice que «escoger la vacuna que prefiere es un riesgo» para la salud no solo de la persona que tiene la oportunidad de inmunizarse, sino para su familia.
“[Si no se aplica la vacuna que está disponible], la persona va a quedar sin la protección necesaria, y no sabemos cuándo va a tener la oportunidad de tener acceso a otra; [el riesgo es que] puede adquirir la enfermedad, tener una forma grave y morir. Entonces, no debe tomar esta decisión que puede poner su vida en riesgo, por una información que se comparte en redes sociales y muchas veces es falsa”, advierte Barbosa.
Efectiva y segura
No es cierto que la vacuna de Sinopharm no cuente con estudios que avalen su eficacia y seguridad, como se repite en redes sociales. Tras una evaluación de los datos de los ensayos clínicos de fase 3, un grupo independiente de expertos recomendó que sea avalada por la Organización Mundial de la Salud. Por ello, se sumó a otras vacunas como Pfizer, AstraZeneca, Moderna, Janssen y Sinovac en mayo.
Ese mes los resultados de las pruebas de fase tres de la vacuna de Sinopharm fueron publicados en la revista JAMA, una de las más importantes publicaciones médicas del mundo. La eficacia se calculó en 78%, por encima del 50% recomendado por la OMS.
En ese entonces, el médico peruano Jesús Anampa, profesor asociado en el Albert Einstein College of Medicine/Montefiore Medical Center y dedicado a la investigación clínica en EE.UU., le dijo a este diario: “La publicación en una revista prestigiosa como JAMA, que tiene procesos rigurosos para revisar estudios ante de su publicación, definitivamente aumenta la transparencia de datos en la comunidad científica sobre eficacia y toxicidad (seguridad) de esta vacuna».
En julio, investigadores del Instituto Nacional de Salud (INS), el Instituto de Evaluación de Tecnologías en Salud e Investigación (Ietsi) de EsSalud y la Universidad Científica del Sur (UCS) publicaron un estudio en más de 600 mil trabajadores de salud del país que mostró que la inmunización completa con Sinopharm (dos dosis) tiene una efectividad de 94% en evitar las muertes por COVID-19. Estos son datos en el contexto de la campaña de vacunación nacional, es decir, de efectividad (’mundo real’).
Al respecto, el subdirector de la OPS, Jarbas Barbosa, dice: “Las vacunas tuvieron un desempeño distinto en los ensayos clínicos de fase tres (eficacia), porque se hicieron en países distintos, en momentos diferentes, donde había más transmisión o menos transmisión, pero cuando vemos ahora los datos de la vida real (efectividad), todas las vacunas que tienen la autorización de uso de emergencia de la OMS brindan una protección de al menos 80% para las formas graves y las muertes. Si usted puede tener la oportunidad de reducir en un 80% la probabilidad de tener una forma grave de la enfermedad y morir, yo creo que no deberían tomar esa mala decisión para su propia vida y la de sus familiares».
Fuente: Diario El Comercio