El ministro de Transporte llegó a Chiclayo para inaugurar un colegio en medio de críticas de los padres de familia de la Institución Educativa San Martín de Porres, el cual carecía de servicios básicos como agua y luz.
El ministro de Transportes y Comunicaciones, Raúl Pérez Reyes, vivió un momento vergonzoso al llegar al colegio N° 10014 San Martín de Porres, donde los padres de familia protestaban por las malas condiciones del plantel. Un equipo de un conocido medio visitó la escuela en Lambayeque y confirmó la falta de agua y luz en el lugar. Los padres se quejaron ante el ministro por la escasez de agua, lo que dificultaba el uso de los baños.
Tras inaugurar el colegio de la ciudad de Chiclayo, el ministro dio explicaciones sobre lo que habría ocurrido con el servicio eléctrico dentro de la institución educativa. Según Pérez Reyes, sí se cuenta con agua y luz pero los cables de energía eléctrica habrían sido sustraídos. La situación se resolvería ese mismo lunes, aseguró.
«Lo que parece ha habido es una sustracción de cables de energía eléctrica en estos días previos a la inauguración, pero el alcalde se ha comprometido a resolverlo hoy mismo. O sea, hay agua y luz, lo que falta es la alimentación eléctrica de la bomba para que pueda llevar el agua a los distintos baños», expresó el titular del Ministerio de Transportes y Comunicaciones.
Los padres continuaron exigiendo a las autoridades una pronta solución a esta problemática fuera de las escuelas, ya que temen que sus hijos puedan enfermarse al no contar con la posibilidad de lavarse las manos o recibir una alimentación adecuada.
Asimismo, preocupa la persistente ola de calor que afecta a esta área y obliga a los residentes a buscar continuamente formas de refrescarse. Finalmente, Pérez Reyes se dirigió a su vehículo oficial y dejó el lugar.