El hecho ocurrió en plena recta final hacia el Mundial Rusia 2018.
En una entrevista reciente, el expresidente de la Federación Peruana de Fútbol, Edwin Oviedo, reveló que Juan Carlos Oblitas, entonces director deportivo, exigió un premio económico a cambio de continuar en su cargo durante las Eliminatorias rumbo al Mundial 2018.
Según Oviedo, Oblitas le pidió un bono de aproximadamente 300 mil dólares, originalmente destinado a jugadores y cuerpo técnico. Incluso, planteó su renuncia si no se le otorgaba dicho monto, justo en un momento clave del proceso clasificatorio.
Aunque esa bonificación no estaba incluida en su contrato, Oviedo aceptó incluir una adenda, priorizando la estabilidad institucional. En su criterio, la permanencia de Oblitas era fundamental por su rol clave en la contratación del técnico Ricardo Gareca.
El exdirectivo explicó que su principal preocupación era no alterar la armonía del grupo a semanas de cerrar la campaña eliminatoria. Cualquier ruptura podía comprometer la clasificación, y por eso decidió ceder.
Finalmente, el equipo logró el objetivo: Perú regresó a una Copa del Mundo tras 36 años. La crisis interna se evitó y Oblitas continuó como parte del equipo que logró el histórico pase a Rusia 2018.