Cuando morimos, nuestro corazón deja de circular la sangre que transporta oxígeno por todo nuestro cuerpo. ¿Qué pasa con el cuerpo tras la descomposición?
Cada cuerpo humano contiene una compleja comunidad de billones de microorganismos que son importantes para nuestra salud mientras estamos vivos. Estos nos ayudan a digerir los alimentos, producir vitaminas esenciales, protegernos de infecciones y cumplir muchas otras funciones críticas. Pero, ¿qué sucede con estos microbios después de nuestra muerte?
Jennifer DeBruyn, microbióloga ambiental que estudia los microbios que viven en un cuerpo en descomposición, compartió evidencia de que nuestros microbios continúan viviendo después de nuestra muerte. No solo eso sino también juegan un papel importante en el reciclaje de nuestro cuerpo para que pueda florecer nueva vida.
La vida de los microbios después de la muerte
Cuando morimos, nuestro corazón deja de circular la sangre que transporta oxígeno por todo nuestro cuerpo. Las células privadas de oxígeno comienzan a digerirse a sí mismas. Las enzimas en esas células que normalmente digieren carbohidratos, proteínas y grasas para obtener energía, comienzan a trabajar en las membranas, proteínas, ADN y otros componentes.
Desde un punto de vista evolutivo, tiene sentido que nuestros microbios hayan evolucionado formas de adaptarse a un cuerpo moribundo. Es así que, tras la muerte, nuestras bacterias pronto tendrán que abandonar su huésped y sobrevivir en el mundo el tiempo suficiente para encontrar un nuevo huésped.
¿Qué pasa con los cuerpos enterrados en el suelo?
Si somos enterrados en el suelo, nuestras bacterias son arrastradas al suelo junto con varios líquidos de descomposición a medida que nuestro cuerpo se descompone. Están entrando en un ambiente completamente nuevo y encontrando una comunidad microbiana completamente nueva en el suelo.