Foto: Grupo Epensa
Saca cara y aclara dudas. Walter Navarro, médico y amigo cercano del expresiente Alan García, señaló que pudo comprobar que la persona a quien los galenos del Hospital Casimiro Ulloa intentaron salvar, el último miércoles, era el exmandatario peruano.
“Yo lo he visto cuando era cadáver, en sala de operaciones. No soy neurólogo, por eso no pude intervenir en la operación”, aclaró.
El médicoa también señaló que él y la familia del líder aprista solicitaron a la propia fiscal de la Nación, Zoraida Ávalos, que autorice a que la necropsia de Alan García se realice en el Hospital Casimiro Ulloa por un tema humanitario.
Se veía venir
Navarro señaló que los médicos del Hospital Casimiro Ulloa ya le habían adelantado que el estado de Alan García era crítico y que su pronóstico era reservado.
Tras el deceso, tuvo acceso al Certificado de Necropsia que declaraba la muerte del exmandatario: una contusión y laceración encefálica y un traumatismo craneoencefálico por proyectil de arma de fuego provocaron el deceso del expresidente.